23 may 2021

Libro, librae, librarum: el nuevo blog de literatura de la red

 ¿Quién soy? Descúbrelo aquí

Hola a todos. Antes que nada me presento: mi nombre es Ana Gabriela Rangel Cuevas, soy licenciada en Lengua y Literaturas Hispánicas y Maestra en Estudios del Discurso por la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo. Actualmente estoy persiguiendo el sueño de convertirme en escritora y esa es una de las razones por las cuales he decido abrir éste blog, pero no es la única. La verdad, siempre me ha gustado la literatura. De niña aprendí a leer de muy pequeña. En casa de mi abuela, que era donde pasaba mucho tiempo, había muchos libros porque mis tíos eran profesores de primaria y yo solía pasar el tiempo jugando con esos libros. Para hacerme pasar el rato sin que diera lata –yo era una niña muy inquieta–, mis tíos solían ponerme a leer; en especial mi tío Carlos que me hacía practicar mi lectura en voz alta.

Al principio por supuesto que leer no me gustaba porque claro, estoy convencida que los lectores no nacen, se hacen. El ambiente familiar en el que nací propició que yo me inclinara por esos gustos. Antes de que yo entrara a la primaria yo tuve acceso a los libros de texto gratuitos y pasé largas horas hojeando aquel emblemático libro amarillo del perrito, ese que según yo sigue siendo el libro de lecturas de primer grado (corríjanme si me equivoco). Recuerdo de ese libro lecturas como Paco el chato o Los changuitos y una de la que no recuerdo el nombre pero me encantaba; trataba de un ratoncito que iba a visitar a su madre y se iba caminando pero sus zapatos se desgastaban tanto que tenía que comprar unos tennis. Luego, los tennis también se acababan y usaba unos patines, los patines se le estropeaban y entonces se iba a descalzo. Sus pies terminaban desechos y se compraba unos pies nuevos y rosas. Por fin llegaba a casa de su madre.

Cuando entré a la primaria y, conforme fui avanzando en ella, fui encontrándome con textos de Pablo Neruda y Gabriela Mistral en mis libros. En ese punto ya me encantaba leer. Pronto migré de sólo leer a pequeños intentos de escritura. Lamentablemente no guardo ningún texto de aquella época. Cuando estaba en la secundaria me topé con los libros de Harry Potter y El Señor de los anillos. Fue maravilloso encontrar un mundo nuevo. También leí El caballero de la armadura oxidada. Me di cuenta de que ya era una lectora, que los libros no se irían de mi vida, pero fue hasta la preparatoria cuando tenía que plantearme qué carrera estudiaría cuando definitivamente la literatura se instauró para siempre en mi vida. Decidí que quería estudiar letras. Y ahora estoy aquí: escribiendo este blog de literatura.

El origen del título de este blog

Pero, ¿por qué escogí este nombre? Bueno, les cuento. Cuando estaba en primer semestre de la carrera llevé latín como una de mis materias. Recuerdo muy bien a mi profesor aunque ahora ya se me escapa su nombre. Era un hombre ya mayor al que solíamos hacerle bastantes travesuras, incluso nos salábamos las clases todo el grupo pero en un par de ocasiones yo me quedaba con un grupo reducido de amigos porque me parecía que no había llegado hasta la universidad para desperdiciar mis clases (sí, era una nerd y lo sigo siendo). Sin embargo lo que verdaderamente me molestaba de él es que yo en verdad quería aprender el idioma y él siempre estaba gritando a diestra y siniestra “¡No traduzcan!”.

¿Cómo, entonces, íbamos a aprender algo de latín? De mis clases yo sólo recuerdo una sola cosa y es algo que nos hacía repetir hasta el cansancio: “Rosa, rosae, rosarum”. Es parte del modelo de la primera declinación y significa rosa. Nada más eso tengo en mi mente de tooooodo el latín y lleve un año entero de esa materia. Lamentable. Quería que este blog tuviera un nombre que hablara de libros, y, en regla si me apegara al latín tendría que usar “liber” o “libri” que es como debe ser. Pero no me sonó llamativo. Y entonces recordé a mi profesor, sentado bajo su escritorio, haciéndonos repetir cansinamente: “Rosa, rosae, rosarum”. Dije en voz alta “libro, librae, librarum”, solté la carcajada, la idea no pudo irse más de mi mente y se quedó para siempre.

Así que si estás leyendo esto, ahora sabes por qué este blog se llama así. Espero que te cause tanta gracia como a mí aunque sigo pensando que es lamentable que no sepa básicamente nada de latín pese a mi escolaridad. Sigo teniendo mi gramática latina y la consulto cada vez que tengo una duda pero eso no ayuda mucho: soy un fiasco en latín y cuando lleve filología tuve serios problemas para pasar la materia con calificaciones aceptables. Pero bueno, pasemos a otra cosa.

Lo que encontrarás en Libro, librae, librarum

Pienso que si algo es mi fuerte, ese es la literatura. En este blog publicaré de manera regular contenido sobre literatura y ocasionalmente cosas que tengan que ver con el arte en general. Una vez al mes recomendaré un autor que me parezca relevante, aunque para iniciar subiré varios ya que este espacio se empieza a mediados de año y quiero subsanar eso subiendo los meses que no estuve en la red para que haya contenido en el blog.

También recomendaré libros, en una sección que he denominado el libro del mes, y subiré algunos de mis textos: habrá cuento y poesía. Cuando tenga algún libro publicado lo mencionaré y les diré dónde lo pueden conseguir. Lo que me parece importante mencionar es que también subiré los trabajos que hice a lo largo de la universidad, tomé la decisión de revisarlos y subirlos para que ustedes los puedan usar para sus propios fines, eso sí, hagan el favor de citar adecuadamente. Incluiré algunos ensayos que he escrito y actividades literarias que me hayan parecido interesantes.

Espero que les guste el contenido que aquí se vaya generando, espero sus comentarios y si quieren pueden buscarme en Facebook como Gaby Rangel o seguirme en Twitter donde me encuentran como @Gaby_Rangel16. Nos leemos en otra entrada.

 


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